Productor: Grupa Żywiec S.A.
País: Polonia
Precio medio: 2.50€
Elaboración: Se elabora tan sólo con tres ingredientes: malta de cebada, lúpulo y agua cristalina de montaña.
Color: Rubia
Estilo: Pale Lager
Tipo: Pale lager polaca
Grado: 5.5°
IBU: 24
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La cerveza polaca Żywiec es el buque insignia del grupo cervecero Żywiec, y se elabora desde 1856 en Żywiec (¿será por Żywiec?), una ciudad del sur de Polonia fronteriza con Eslovaquia y Chequia.
Cuando se comenzó a producir, esta ciudad pertenecía al Imperio Austro-Húngaro, y la cervecera fue propiedad de los Habsburgo (fue en su origen un castillo-cervecería fundado por Alberto Federico de Habsburgo) hasta que, tras la Segunda Guerra Mundial, el gobierno comunista de Polonia la confiscó. Hoy es propiedad del grupo Heineken, pero previamente acontecieron varios y curiosos avatares, entre los que se encuentra la reclamación judicial de la propiedad y del uso comercial del apellido y escudo de armas por parte de los descendientes de los primeros propietarios, resuelta extrajudicialmente en el año 2005 sin que sean públicos los términos del acuerdo.
Rivaliza con Tyskie en ser la cerveza polaca más vendida, los de Tyskie dicen que se vende más la suya dentro y fuera de Polonia, los de Żywiec que ellos son “líderes de cerveza premium en Polonia” y la que suya es “la cerveza polaca más famosa en el extranjero”.
Bueno, bajando al barro, la cerveza que nos ocupa, la Żywiec, es una pale lager que está estupenda, compré una botella (va en formato de ½ litro) un día por curiosidad en La Boutique de la Cerveza, y volví a por más de inmediato. Me encanta.
De color ambarino dorado, transparente, exhibe una buena capa de espuma blanca que se desvanece rápidamente.
En nariz es “descongestiva”, mineral y herbácea, pero ese tipo de herbáceo puntito dulce tipo hinojo.
Y vamos a la boca, que es donde se juega el partido: opulenta, llena la boca, abarca las papilas, con sensación de que está elaborada con agua limpia, clara, de manantial. Tiene dos cositas que la hacen adictiva: un amargor amable, pero amargor, muy rollo pilsner checa, y unos inesperados matices tostados enloquecedores. Lager, sí, ligera, pero… eso.
Si la bebes a ciegas, seguro que apuntas a un color algo más oscuro.
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