Ubicación: Rúa Cima do Lugar, 1
Arzúa (Coruña, A)
España
Código Postal: 15810
Teléfono: 981508107
Horario: Cierra domingos y lunes
Menciones:
Tipo de cocina: Actualizada y Gallega
Te puede interesar: Barra y Con terraza
Web:
Precio estimado: 38,50€
You need to login in order to like this post: click here
Pues si la primera etapa del GastroCamino 2024 fue intensa… la segunda no le anduvo a la zaga.
El de la bici, a estas alturas ya por todos conocido como “El Tigre de Mondoñedo”, se marcó otro etapón de campeonato (esta vez sin hacer honor a su otro apelativo, “El Tuercas”), tropecientosmil km del tirón, los que separan, por el monte, Vilalba de Arzúa.
Y los caminantes, hay que ver cómo nos cundió el día, hicimos de nuevo tres sub-etapas, en diferentes tramos del PR-G 169: Fervenza das Hortas, una de las cascadas que presenta mayor caída de Galicia y desde luego una de las más bellas (vaya subidita); paseo fallido por el Embalse de Portodemouros (estaba muy feo y buscamos otra alternativa); paraje de Fonte Santa, este sí que era bonito, de verdad que sí, con su capilla, su fuente, su molino y su río, o ríos más bien, el río Iso y el Rego Carracedo, a la vera del cual hicimos una caminata de locura, internándonos en un bosque atlántico mágico, siempre sin perder de vista las cristalinas aguas del río, que presentaban un peculiar color cobrizo.
Para peculiares colores, los de las hortensias que no dejamos de ver por todas las poblaciones que pasamos, cómo se crían por Galicia, oye, los caminantes íbamos locos contemplando los maravillosos macizos azules, mientras que el de la bici prefería las rosas desvaídas pastelillo, lo que le valió un nuevo sobrenombre: “El Moñas”.
Ya en el punto de destino, Arzúa, seguimos nuestra mecánica habitual: tras el ejercicio, duchita, aperitivo largo por diferentes bares de Arzúa, siestorra, paseo por el pueblo, y a cenar al mejor restaurante de la contornada disponible, que el día, o noche, de autos fue Casa Nené.
Se encuentra en la zona con más encanto del pueblo, detrás de la Capilla de la Magdalena, al final de ese casco medieval (que se salvó a duras penas de los estragos de la uralita, tristemente protagonista del urbanismo de hace décadas en esas localidades), en una calle cuidada y con ambientillo guapo.
Y qué bonito es el restaurante (también hotel), en un edificio antiguo reformado, con una preciosa terraza de llamativos toldos y paravanes verdes. En la planta calle hay una barra, un espacio minúsculo, y subiendo unas escaleras llegas a la sala del restaurante. Pequeñita, coqueta, con mucho duende, piedra, madera, asientos de cuero anclados en la pared, lámparas cálidas rústicas que proporcionan una acertada iluminación…
La propuesta gastronómica de Casa Nené se vertebra en el culto a la gastronomía gallega, pero intentando imprimirle toques modernos, actualizando sus creaciones y buscando la originalidad.
Su carta es más bien corta, buceamos en ella buscando cositas más bien frescas. Empezábamos a notar ya los excesos del GastroCamino, a mediodía, después de mil cerves y tapas, nos habíamos apretado una tortilla de patatas enorme (y nos dijeron que era la pequeña de los dos tamaños que hacen) y queríamos llegar fuertes a Santiago para acometer la cena de fin de fiesta. Así que nos compusimos el siguiente degus, todo para compartir:
—————
• Ensalada de tomate de temporada con ventresca de bonito y queso Galmesan
• Ensaladilla con tartar de atún y su mahonesa de piparras
• Pulpo a la plancha con parmentier de patata y pimentón, salsa verde y ajada
• Fajita de gallo celta y guanciale con salsa de mostaza y miel
• Bacalao alioli con espinacas y mermelada de tomate
—————
Puesssss podía perfectamente haber dicho que cenamos muy bien… si no fuera por el bacalao, y la culpa fue compartida, nuestra y del camarero. Me explico: fuera de carta había como sugerencia del día merluza de Celeiro, que es lo que queríamos pedir, pero el camarero nos empujó y empujó al bacalao, al “bacalao alioli con espinacas y mermelada de tomate”, que era la especialidad de la casa, que debíamos probarlo… pero como estaba gratinado con alioli, nos tiraba a los tres para atrás, así que al final, sacó el taco de bacalao con sus espinacas, su mermelada de tomate, sus brotes y sin su alioli. Y, queremos creer que fue eso, la falta de gratinado, lo que fastidió el plato. Le debimos cambiar el paso al cocinero, y el caso es que salió el bacalao con una apariencia bárbara, pero… secorris, sus lascas estaban pegadas, no deslizaban como los buenos bacalaos… nada, plato fallido, qué pena.
Hasta ese momento, todo había transcurrido muy bien: la “ensalada de tomate de temporada con ventresca de bonito y queso Galmesan”, estaba muy rica (agradecimos el guiño local que hicieron con ese queso de la zona Arzúa-Ulloa pero rollo parmesano); la “ensaladilla con tartar de atún y su mahonesa de piparras”, soberbia, original, muy lograda; el “pulpo a la plancha con parmentier de patata y pimentón, salsa verde y ajada”, sabrosón y diferente, con sus tentáculos cocidos al vapor y posteriormente horneados a tope; y las “fajitas de gallo celta y guanciale con salsa de mostaza y miel”, nos parecieron sorprendentes, un sabor potente y marcado, que curiosamente a Nacho le recordó a una hamburguesa de toda la vida, y a mí a un perrito caliente, probablemente por el resultado sápido de la mezcla de la mostaza y la miel y la pujanza del gallo.
Pero, si por algo destaca este local, sobre todo para los enochiflados como yo, es por su culto al vino. Pilotan, pilotan muuucho, con cerca de 500 referencias, más de la mitad gallegas. Como sólo bebía yo y conecté rápido con el sumiller, le dije que me fuera sacando copas de cositas gallegas interesantes, y este fue el resultado:
Attis Embaixador Albariño 2018 Rías Baixas D.O., fantástico / Vulpes 2020 de Adega Entreosrios, un raposo (albarín blanco) sin D.O. original a rabiar, producción mínima, variedad casi desaparecida / Chavellas 2021 de Roberto Gándara, merenzao y bastarda, crianza de 10 meses, San Clodio sin D.O., un tinto particular, fresco, expresivo a más no poder, elegante, incluso redondo / Tauromaquia Oloroso Viejísmo de Gracia Hnos Pedro Ximénez de la D.O. Montilla-Moriles, obsequio de la casa, un gran oloroso, intenso y penetrante.
Si quitamos el bacalao, muy bien, pero como el bacalao no lo podemos quitar… Pero vosotros, sufridos y escasos lectores, sí lo podéis quitar, o mejor, no quitar el bacalao pero tampoco el gratén de alioli, así que… os lo recomiendo, y si os gusta el mundo del vino, os lo recomiendo efusivamente.
You need to login in order to like this post: click here
Una puntualización, por si quien lee esta segunda etapa no ubica el asunto quesístico.
El Galmesan, por el resultado debido a su forma de elaboración, se asemeja al queso Grana Padano o Parmiggiano Regiano, ambos DOP. Antes bien, este queso aun siendo elaborado en la zona geográfica de Arzúa no goza del sello de Arzúa-Ulloa DOP.
… y a tal fin hago constar ?
You need to login in order to like this post: click here
Sip, así es, gracias por la aclaración, quizás mi explicación daba lugar a error.
Nos lo explicaron tanto en una mantequería, como en el propio restaurante, por eso no he mencionado nada de D.O.P. en la reseña.
✅️
You need to login in order to like this post: click here
Bola extra: El queso llamado “patelo”. Se trata de un queso igual al Arzúa-Ulloa DOP, peeeero no pertenece a la DOP. Habitualmente por ser elaborado en algún lugar que no pertenece al pliego de condiciones de la misma.
PS Sip, soy como El libro gordo de Petete :-p
You need to login in order to like this post: click here
Oooño! Primera noticia.
Si lo sé antes, lo pruebo
You need to login in order to like this post: click here