Teléfono: 674598556
Ubicación: C. de Espronceda, 34, Chamberí, Madrid 28003
Madrid (Madrid)
España
Horario: Cierra domingos y lunes
Momentos: Desayuno, Merienda, y Cena
Tipo de cocina: Coreana
Web:
Precio medio: 15.00€
Tapa, bebida, producto estrella: Gyozas
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He tardado en ir. Y casi lo mismo en contároslo. La vida y los ríos que van a parar al mar; ya sabéis, estimados gaúdaros 😉 Vamos pues en en plan rollo planteamiento-nudo-desenlace (los que no son de leer que vayan saltando de párrafo en párrafo hasta encontrar lo mollar. Aunque si no son de leer igual la palabra “párrafo” les despista).
Pues este lugar se puso de moda, muy de moda, de modísima, hace un par de años. Y es que Madrid, este Madrid, tiene una idiosincrasia que da para estudio de dinámica de fluidos, sociológico y psicológico. Todo a la vez y encuadernado con anillas en los bajos de Moncloa. Y en fin, estimados gaudarines, que ya sabéis que las modas y yo, como que no. Y la zona, porque esa es otra. La zona, que dicho así parezco Antonio Diaz Miguel, pero me refiero al barrio. Ponzano. Cortito y al pie: Ponzano es todo lo que está mal en gastronomía, y el 80% de lo que está mal en el mundo. Quizá me quedo corto en ambas estimaciones. Pues resulta que este lugar está en esa zona, y en fin, que pereza infinita. Curiosidad, sí, pero ponía en el peso todo lo anterior y se me pasaba la curiosidad rapidito.
Pero ooooye, es llegar agosto, se vacía la ciudad… calor infinito y aire irrespirable, pero al menos… se vacía la ciudad… Y un Madrid sin madrileños parece un buen momento para darse un pirulo a conocerlo. Y no fui sólo una vez, si no dos de forma consecutiva. Es cosa de aprovechar eso, que se vacía la ciudad (de madrileños).
… pues de primeras, como que ni parece ser un local en ese lugar. Ni forma ni fondo, y eso ya, de primeras, me agrada. Un lugar normal, lejos del superosea de la zona y del asiático estándar madrileño (y disculpad la concisión, pero es que no conozco los restaurantes asiáticos en otros lugares). Y así, como que de repente, nada más entrar, aparté los prejuicios y me dispuse a ser feliz, que es de lo que se trata.
En la primera visita el asunto fue de una muy refrescante y agradable ensalada de pepino, kimchi y “media” de wonton frito. Cucha que el wonton empiezas como en cualquier otro lugar, pim-pam-truku-truku, que comerse esto no tiene más misterio. Y cuando te lo has zampado te quedas así como… oye, ¿pues sabes que este wonton no parece uno más del montón? Que fue en ese momento cuando pensé en que tenía que volver para probar algo más, porque igual este lugar tenía un algo idem.
Vamos ahora con el kimchi. Como comentaba nuestro estimado compañero Aitor está subido de ajo. No es algo que me moleste. No me resulta “demasiado”, sólo significativo. No obstante no me terminó de hacer el peso este kimchi. Eché en falta un algo de chispa ácida. Un toque de su naturaleza fermentativa. Está bien, sí. Me lo como, pues claro que sí. Que no es un kimchi que me apetezca, pues también.
Todo este asunto, con una cerve-sin, fueronse a unos reketemuyapañados 17 EUR.
… y volví, claro. Que si se me enarca la ceja hago por volver. Y en esta segunda visita el asunto fuese de rábano encurtido, que estaba para comerse dos kilos del tirón. Y dim-sum de cerdo y col al vapor, que también estaba para comerse 147 en apnea. De nuevo con una cerve-sin la cosa fueron 16,2 EUR
Pues oye, un muy buen sitio. Pese al hype (chupaos esa mandarina Zs & millenials) y la zona, un lugar de los que apetece ir y volver.
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Jejeje, lo has intentado, con ahínco, te has empleado a fondo en la excusitanonpetita, sí, pero… no lo has conseguido: te has vuelto un early adopter, y punto.
Bueno, no hay mal que por bien no venga, descubriremos de tu mano los sitios pijis, megapichis y rabiosamente nuevos de la capi, seguro que de Ponzano no se nos escapa ni uno.
🤣🤣🤣
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Pequeño café coreano, basado en los cafés de especialidad (sic), zumos diversos y picoteo en forma de dumplings, kimchi y wanton. También tienen sopas, pero un 24 de agosto en los madriles, como que no.
Comí dumplings o gyozas de verduras y otros de gambas y cerdo. Muy, muy ricos, merecen la fama. Especialmente los segundos. El kimchi rico, pero subido de ajo para mi gusto, que soy un poco pariente del Conde Drácula.
Queda en mi debe probar los wanton y la sopas, cuando mejore el tiempo en Mordor.
Todo esto fui a recogerlo al sitio, no pude probar el restaurante-cafetería en sí, pero es un lugar pequeñito, con dos plantas. Aparte de cafés también tenía cerveza.
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¿También llamáis Mordor a Madrid?
En Zaragoza hacemos lo propio por la niebla… ? ¿Madrid por qué?
Abrzs
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Calor, orcos, inhabitabilidad, contaminación, Sauron al mando…
¿Te parece poco?
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… no nos cruzamos ese día de chiripa ?
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Jaja, vale, vale, entendido…
Por cierto, ayer me topé con tres reseñas en RRSS de este establecimiento, parece que están de plena moda en los circuitos foodies del foro…
Y en lugar de Casa Pei+ dos de ellos le llaman Casa Peiplus ?
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Vaya, fuiste tú también a recoger algo? Qué te pareció?
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… en breve escribo nota 😉 #clickbaitingforawhile ?
Pero no fui a recoger, ya que iba, me quedé ?
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Sí, Aurelio. Madrid es así. Será probablemente el sitio de España y parte de Europa con más establecimientos hosteleros y vamos todos a los mismos sitios. Pues eso, Mordor.
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… pero además, Ponzano, el fuego del Monte del Destino 🤦♂️
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